Los países que obtuvieron licencias para grandes cantidades de espectro en bandas medias, especialmente 3,5 GHz, están disfrutando de las redes 5G más rápidas de América Latina. Este dato se extrajo de nuevas investigaciones de la empresa de análisis Opensignal, en asociación con el equipo de espectro de la GSMA.

La tecnología 5G avanza en la región; sin embargo, el desempeño de la red difiere considerablemente de un país a otro. Las diferencias se pueden atribuir en gran parte a la disponibilidad de espectro. Las velocidades de descarga aumentan casi linealmente con la cantidad promedio de ancho de banda disponible. Los usuarios de Brasil y Uruguay se benefician de los mayores anchos de banda de espectro 5G, lo que resulta en algunas de las velocidades de descarga más rápidas de la región, según los análisis de Opensignal.

En Brasil, la combinación de 5G Standalone (5G SA) y el despliegue de espectro en la banda de 3,5 GHz dio como resultado grandes mejoras en el desempeño. En promedio, las velocidades de descarga 5G en el país son casi 11 veces más rápidas que las de 4G. Esta mejora evidencia los beneficios que se están perdiendo los países que aún no han lanzado servicios de quinta generación.

El impacto positivo del licenciamiento de grandes cantidades de espectro en la banda de 3,5 GHz se puede ver más allá de América Latina. Análisis recientes en el mercado de EE. UU., también llevados adelante por Opensignal, demuestran que otorgar licencias de mayor capacidad de espectro impulsa la disponibilidad y el desempeño del acceso inalámbrico fijo (FWA). El FWA se convirtió en uno de los principales factores del crecimiento de la banda ancha fija (90%), ya que logra un porcentaje de conexiones en zonas urbanas del país casi tan alto como en las zonas rurales.

Países como Dinamarca, Finlandia y los Emiratos Árabes Unidos también están aprovechando los beneficios de licenciar grandes cantidades de espectro en bandas medias. Han otorgado licencias de 120 a 200 MHz por operador en la banda de 3,5 GHz. Como resultado, los tres países, junto con los EE. UU., se encuentran entre los primeros 10 países en el ranking del Índice de conectividad 5G de GSMA Intelligence, el cual tiene en cuenta diferentes atributos, como la experiencia de la red y la disponibilidad del espectro.

El espectro en bandas medias ha sido el principal motor del éxito del 5G y su futura expansión. Para finales del primer trimestre de 2024, más del 75% de los lanzamientos de red habían hecho uso del rango de 3,5 GHz. El análisis también muestra que la mayoría de los países de América Latina recurren a dicho rango para prestar el servicio 5G. Las proyecciones indican que las bandas medias generarán la mayor parte de los beneficios socioeconómicos de 5G, con un aumento de más de USD 610 mil millones en el PIB mundial en 2030 (casi el 65% del valor socioeconómico general producido por el 5G).

Más allá del claro impacto de la banda de 3,5 GHz, la asignación del espectro debe ser un esfuerzo continuo: ningún país puede darse el lujo de dar por finalizada la tarea. En promedio, las redes móviles requerirán 2 GHz de espectro en bandas medias por país para el año 2030.5 La adecuada disponibilidad de espectro puede ayudar a lograr un éxito sostenido en América Latina y el resto del mundo. Se necesitan hojas de ruta para capacidad adicional que aseguren el crecimiento de los servicios móviles y fijos.

La capacidad de los países de poner a disposición esa cantidad de espectro depende, en gran medida, del futuro de la banda de 6 GHz. El año pasado, la CMR-23 identificó la banda de 6 GHz (6 425-7 125 GHz) para el uso móvil por parte de los países de todas las Regiones de la UIT (Europa, Oriente Medio y África, la Comunidad de Estados Independientes, el continente americano y Asia-Pacífico), y se acordaron las condiciones globales armonizadas para su uso en el Reglamento de Radiocomunicaciones de la UIT. Esto implica una potencial población de miles de millones de personas bajo la huella móvil armonizada de 6 GHz. También funciona como paso crítico para los fabricantes del ecosistema de equipos en 6 GHz.

Por lo tanto, los países que quieran estar a la vanguardia o ponerse al día con sus vecinos más exitosos deberían considerar:

  • Garantizar que las bandas medias existentes estén asignadas en su totalidad a los operadores móviles, con neutralidad tecnológica, lo cual permitirá que se usen para las tecnologías nuevas.
  • Poner la banda de 3,3-3,8 GHz a disposición para los servicios móviles.
  • Poner la banda de 6 GHz, en el rango de 6,425-7,125 GHz, a disposición para servicios móviles licenciados.
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